lunes, 18 de mayo de 2015

Bullying



 El bullying como hecho o la palabra en sí,  parece estar de moda, cualquier muestra de provocación física o verbal  de un niño a otro,  asume de inmediato esta connotación,  “A mi hijo le hacen bullying”.
Sería bueno introducir cual es el punto de responsabilidad de los participantes de un bullying, en este proceso, la tendencia actual es poner toda la atención sobre el que agrede,   considero importante  que todas las partes integrantes del bulling tienen igual importancia en su responsabilidad.
Un agresor, es un sujeto con características de un atacante, suele tomar a alguien  como víctima, quien le procura malestar y sufrimiento a otro es porque presenta alguna disfunción o perturbación que lo lleva a ello, lo cual lo responsabiliza a él y también a su familia.

Resultado de imagen para no a la violenciaLa víctima es  alguien  cuya característica
principal es carecer de voluntad ó carácter para defenderse, es decir alguien sumiso que permite el abuso sin denunciarlo. Cuando alguien  atraviesa la barrera imaginaria que separa el cuerpo propio del ajeno,  uno se pregunta  ¿Qué sucede con las víctimas de bullying  o cualquier tipo de agresión que no pueden denunciar por lo que  atraviesan, no pueden manifestar su sufrimiento a alguien? Y permiten que se invada el espacio de su propio cuerpo, ello lo hace responsable de su silencio y también a su familia.


Quiero introducir justo en este punto, la trasmisión que realizan los padres en la educación de un niño, si pensamos en ellos como los principales responsables de la formación de una persona, y como interviene el  colegio,  un responsable ineludible de la formación integral de un alumno.
En los tiempos que corren, muchas veces nos encontramos con un modus operandi donde el primer movimiento, la primera respuesta, es depositar  la responsabilidad afuera, la culpa la  tiene otro.
No encontraremos ninguna vía de resolución o respuesta si no hay el asumir de cada quien su propia e intransferible responsabilidad.